Ninguna
idea puede adueñarse de mi personalidad. Ninguna forma accede al ser. Este
instante es todo lo que soy. Lo que sucede ahora lo desconozco: no sé nada
más allá de lo que soy. Me rindo en cada pensamiento, no pertenecen a mi verdadero hogar. Son sólo el ruido de mi sueño. No hay nada que pueda
hacerme daño en la presencia del ser.